Prensa/Minhvi, 25 de abril de 2017.- La Gran Misión Vivienda Venezuela (GMVV), no nació de la mano del Comandante Hugo Chávez como un plan sin bases ni fundamentos, ese 30 de abril de 2011, cuando desde el Teresa Carreño fue creada, el líder de la Revolución Bolivariana detalló los cinco vértices que le potencian hasta el día de hoy, como una de las políticas del proceso bolivariano más exitosas y que mayor suma de felicidad ha brindado a su pueblo.
“La Gran Misión Vivienda tiene un conjunto de vértices, y el terreno es uno de ellos (…) pero esas tierras no se van a mercantilizar (…) vamos a pulverizar el valor de cambio, y pondremos en primer lugar el valor de uso (...), además del terreno vienen los entes constituidos asumiendo una responsabilidad de Estado, en tercer lugar, y es uno de los más importantes mucho más que el Gobierno es el Poder Popular, el pueblo organizado (…) el otro vértice es el financiamiento (…) el Gobierno asumiendo su responsabilidad ha hecho un fondo de 13 mil millones de bolívares y pronto vamos a inyectarle nuevos recursos para llegar a la mitad y la otra mitad nuestros compatriotas de la banca pública y privada, porque ese es el otro drama del pueblo ¿ quién me financia la vivienda?, (…) otro vértice son los materiales a través de un proceso de industrialización masiva y el Registro de la Gran Misión Vivienda Venezuela”.
A este llamado acudió masivamente el pueblo venezolano logrando los dos millones 711 mil inscritos.
Enfatizó, que el pueblo debía incorporarse de inmediato al proceso constructivo a través de las Comunas, los Consejos Comunales y las Brigadas de Constructores de la Misión Ribas y las que se organicen en todos los barrios. Para ello le suministró en ese mismo año los recursos para la construcción de más de 40 mil nuevas viviendas, un 35 por ciento de la meta de construcción estimada en 2011 de 150 mil viviendas.
Hoy en día el Poder Popular organizado ha levantado más del 40 por ciento de los nuevos Hogares de la Patria de la GMVV.
Del refugio a su casa, a su apartamento
“No van a volver a las barrancas de la muerte” exclamaba Chávez al referirse a la adjudicación de viviendas para las familias damnificadas como consecuencias de las fuertes lluvias que entre otros daños desataron la tristemente recordada tragedia de Vargas.
Aseguró que estas familias se integraban al Vivir Viviendo, término que se alojó como premisa para los nuevos urbanismos a construir por la GMVV dejando atrás las “cajas de fósforo” construidas en la cuarta, que sumían al pueblo en la inconformidad y la tristeza.
Hoy en día nuestras viviendas constan de dos o tres habitaciones, uno o dos baños, cocina, comedor y lavandero, distribuidos entre 52 a 70 metros cuadrados.
Además sus habitantes disfrutan de todos los servicios: agua potable, luz, gas, locales socio productivos para el desarrollo de actividades económicas para su autosustento y de áreas verdes comunes para el esparcimiento y disfrute.
Una nueva visión de cómo debía ser la vida en estos urbanismos en conjunción con el hábitat, una visión humanista que hasta el día de hoy se mantiene para la felicidad de muchos y la incredulidad de otros.
Pues hasta ese momento ningún gobierno había ni remotamente pensado en dar poder al pueblo dentro de uno de sus proyectos o planes y de brindarles una vida digna, el “Vivir Viviendo” y no el vivir muriendo, eso era imposible para los gobernantes de la cuarta.
Hoy, a sus seis años de creada se acerca al millón 600 mil familias venezolanas beneficiadas y continúa incansablemente hacia los 3 millones de nuevos Hogares de la Patria para el 2019 de la mano del pueblo… ¡Duélale a quien le duela!
Prensa:CR:(Con información de Corpolara/VTV/ )
Gráfica: Archivo Minhvi
Contacto: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.
Twitter: @Minhvi_Oficial
Instagram: Minhvi_Oficial
Facebook: Ministerio del Poder Popular para Hábitat y Vivienda